Si lo que estás recorriendo es el camino de tus sueños , compremétete con él.
No dejes la puerta de salida abierta con la disculpa : "En realidad no era esto lo que yo quería". Esta frase -tan utilizada- guarda dentro de sí la semilla de la derrota.
Asume tu camino . Aunque debas dar pasos inciertos , aunque sepás que puedes hacerlo mejor de lo que lo estas haciendo.
Si aceptas las posibilidades en el presente, con toda certeza mejorarás en el futuro.
Pero si niegas tus limitaciones, jamás te veras libres de ellas.
Enfrenta el camino de tus sueños con valores, no tengas miedo de la crítica de los demás. Y -sobre todo- no te dejes paralizar por tu propia critica.
Dios estará conyigo en las noches de insomio y enjuagará con su amor tus lágrimas ocultas.Dios es el Dios de los valientes .

Inedito